Rienda suelta a la integración/ Para saber más

La hípica es uno de los pocos deportes paralímpicos en el que todos los discapacitados compiten juntos, aunque divididos en cuatro clases, en función de las capacidades funcionales del deportista.

Se trata de un deporte muy beneficioso para las personas con minusvalía que lo practican, si bien está más extendido entre los discapacitados intelectuales, que disponen de un campeonato de Doma Clásica. En las competiciones, los participantes deben ejecutar una serie de ejercicios o reprises.

La Federación Española de Deportes para Discapacitados Intelectuales (FEDDI)  establece habitualmente tres niveles: competición, adaptado y habilidades deportivas. En el primero de ellos, para jinetes y amazonas con mayor capacidad se suele realizar el reprise III (paso, trote  y galope del caballo) algo que fue admitido en los juegos paralimpicos de Sidney 2000. en la adaptada es obligatorio el reprise II (paso y trote), en tanto que para las habilidades deportivas se realiza el reprise I (paso con acompañante).

Además la FEDDI suele preparar una semana de formación previa al campeonato de España, donde los deportistas se dividen en grupos de trabajo y en los que reciben conceptos sobre diferentes áreas temáticas, como manejo en pista, volteo, cuidados del caballo, o clases teóricas.